viernes, 24 de julio de 2015
Crear empresa, en mi opinión, incluye contador, y ser competitivo cuando ya se tiene empresa, incluye abogado. No se trata simplemente de una inclusión, se trata de una exigencia que en el sector de las tecnologías viene imponiéndose poco a poco.
Las empresas de tecnología, así como las empresas de cualquier sector, manejan dos ámbitos: un ámbito interno y uno externo y así mismo, dependiendo de su capacidad y su tamaño necesitarán uno o varios de los siguientes abogados.
En el ámbito interno, requerirá consulta en Derecho comercial, especialmente societario, para todos los temas que tienen que ver con la constitución de la empresa y formas asociativas escogidas, las cuales influyen en la forma en la que se toman y documentan las decisiones en general; se requerirá además, consulta con un abogado del área laboral para la contratación de empleados, prestaciones, salarios y dudas relacionadas.
Tratándose de empresas del sector de Tecnología, dependiendo de su “core” de negocio, hablaríamos de una consulta a un abogado de la rama comercial en lo que a temas de patentes y derechos de autor se refiere y eventualmente, a un abogado con conocimientos en derecho informático para tratar sobre temas de protección de datos, así como de proyección y evaluación de políticas de gestión de información cuando se manejan bases de datos o cuando hay relación con los clientes a través de aplicaciones o páginas web.
«Un abogado con conocimientos en derecho informático para temas de protección de datos, proyección y evaluación de políticas de gestión de información.»
En el ámbito externo, tenemos clientes del sector público y del sector privado, este último sector requiere un abogado que no solo sepa llevar a cabo el contrato desde el ámbito comercial, sino que debe tener experiencia en el área tecnológica.
En el sector público, primero tenemos la participación en la contratación pública, lo cual requiere un abogado integral: que sepa tanto de derecho administrativo, como de derecho comercial y que no sea ajeno a los temas tecnológicos que van a entrar en discusión mediante observaciones los cuales deben contar con una apropiada respuesta no sólo técnica sino con una defensa jurídica.
Segundo, tenemos la ejecución de los contratos o proyectos de carácter tecnológico: he visto una excelente interlocución entre las Entidades públicas y abogados expertos en tecnología, esto tiene una razón: las soluciones tecnológicas están creadas al servicio y satisfacción del usuario final, esto hace que el 20% de los problemas que se presenten en la ejecución sean de orden tecnológico, pero el 80% restante se derivan del contrato, su presupuesto, forma de pago y obligaciones, lo cual amerita un trato jurídico con la entidad pública en aras de su resolución.
Dicha resolución requiere un abogado no tan común: es un abogado que no demanda y no enfrenta a su “contraparte”, por el contrario, hace parte de su estrategia comercial y como estratega comercial promueve su producto, mejora sus ventas, concilia con la entidad e incluso está en capacidad de gerenciar el proyecto, evitando contratiempos y facilitando el cumplimiento del contrato por parte de su equipo de trabajo, dejando satisfecha a la Entidad. Este es el abogado TIC del campo corporativo multifacético, maneja la contratación, el proyecto y además es un muy buen comercial. Estas cualidades lo hacen difícil de encasillar en un área tradicional y específica del derecho. Es la integración de dichas habilidades lo que genera una ventaja competitiva estratégica en el sector público para las empresas de tecnología.
Si tiene alguna inquietud acerca de este tema u otros similares ingrese a http://www.abogadotic.co, escríbanos al correo [email protected], o pregúnte en Twitter a @NODAbogada